Hoy fue mi primer día en el retiro de año nuevo “Expande tu mente” en Vagabond Temple, Camboya. Llegue ayer por la mañana. Madrugue en KL a las 4:30 de la mañana para tomar el vuelo de las 7. A la medianoche el día anterior caí en cuenta que no había reservado el tiquete de bus y por lo tanto ya no había así que termine teniendo que pagar casi 60$ de un taxi privado para llegar del aeropuerto al templo a 3h de distancia. Ni me moleste mucho, obvio que mamera tener que pagar toda esa plata pero la verdad la cabeza no me daba para más esos días como para ponerme a pensar en ese bus.
El espacio es súper diferente, muchísimo más grande y lleno de árboles y naturaleza. Fue muy rico poder llegar y ver caras conocidas y recibir sus abrazos. Lloré un poco obviamente pues todavía tengo los sentimientos a flor de piel. Después de mi primer almuerzo vegano hice una siesta y obviamente me quede profunda y llegue tarde a la reunión. Afortunadamente comenzó 5 min tarde asi que no llegue muy tarde. Después de recorrer el nuevo espacio nos reunimos y comenzamos las actividades para intentar conocernos un poco mas. Son aproximadamente 50 personas, se imaginarán lo casi imposible que es aprenderse todos los nombres pero creo que lo voy logrando..por suerte ya conocía a algunos.
Después de una ronda de nombres y de caminar, movernos, reírnos, termine emparejada con una chica llamada Louise. La tarea era hablar dos minutos sobre lo que veíamos en la otra persona. Fue interesante porque sentí que ella estaba muy nerviosa y no sabia que decir bien, dijo que me veía con confianza y feliz. Le dije después que la confianza había aprendido a “fake it till you make it” y que estaba contenta con quien era ahora por lo que era una emoción que la gente veía en mi normalmente pero por la parte de felicidad no estaba muy en lo correcto. Le dije que igual he aprendido en la vida a parecer más feliz de lo que me siento y que probablemente por eso tenía esa apariencia ante ella.
En la noche tuvimos nuestra ceremonia de iniciación, la verdad no pude disfrutarla o enfocarme lo suficiente en ella como me hubiese gustado. La mente está constantemente pensando en lo que paso y me cuesta mucho desconectarme. De igual manera fue una hermosa ceremonia, comenzó a llover justo cuando comenzamos y el sonido de la lluvia con el frío viento y los cantos producían una escena mágica.
Me fui a dormir con el corazón aun apachurrado pero contenta de estar aquí, en un lugar donde me siento segura y sin obligación de nada y ante nadie sino conmigo misma… de estar comprometida con las actividades, de estar presente y de aceptar todo lo que estoy viviendo y aprovecharlo.
No me desperté con el primer gong a las 6 como hubiese querido, creo que por primera vez en muchos días pude dormir bien y aproveche la cama. Estuve entre sueño y despierta, estirándome y descansando hasta las 6:45. Me puse la ropa, me fui a comer un banano antes de comenzar (ya se que no puedo ir a clase sin comer) y aproveche unos 10 minutos antes de clase para acostarme sobre unos bloques, abriendo el pecho/corazón. Quiero enfocarme mucho en esas posturas ya que siento que es un momento donde lo natural es cerrarse y no quiero que esto suceda, quiero seguir con el corazón abierto ante la vida.
La clase de hoy y el día en general se enfocaba en encontrar y trabajar tu “core”, o esa fuerza interior, ese verdadero yo que tenemos dentro y que a veces el ego/personalidad no escucha. Fue una clase fuerte pero no la sufri, nuevamente mi cabeza estaba pensando en otras cosas y ni siquiera llegue a sentirme frustrada cuando una posición difícil no salía, simplemente continuaba. Eventualmente cuando me acomodé en la postura de niño (balasana) que algo dentro de mí se movió y tuve que tomarme unos minutos mientras hacían una postura para llorar. Después al entrar a shavasana fue igual, con los ojos cerrados las lágrimas se me escurrían y mi respiración se entrecortaba. Una de las profesoras estaba asistiendo la clase y se sentó detrás mío y me hizo reiki, masajeo mi cabeza y con ternura me quito las lágrimas que iban escurriendo. Podía ver energía morada que iba moviéndose mientras ella estaba hi y lentamente mi respiración se tranquilizaba hasta poder estar más tranquila. Al terminar pude hablar con ella y explicarle todo, es mexicana así que poder hablar y expresarme en español fue gratificante.
Después de desayunar salí a caminar un poco y conocer con Masha, una arquitecta ucraniana que trabaja en KL. Por primera vez en muchos días pude ver el mar y aunque no me pude meter pues no era playa, solo estar cerca y escucharlo y sentirlo se sintió muy bien.
La clase o charla del medio día continúo tratando el yo interior, esa fuerza y luz que todos tenemos dentro y que no siempre es fácil escuchar o dejarse expresar pues creamos una personalidad que no siempre está conectada con nuestra realidad. Fue intenso responder las siguientes preguntas:
- ¿Quien soy?
- ¿Que quiero?
- ¿Porque lo quiero?
- ¿Como lo voy a lograr?
- ¿Cuales son las limitaciones para lograrlo (internas y externas)?
- ¿Como las voy a superar?
Algunos de los pensamientos que salieron fue…Soy muy orientada hacia la familia, tengo 29 años y no estoy cumpliendo con el rol que la sociedad quiere o dicta que debería estar viviendo pero eso no me molesta. Sin embargo, estoy comenzando a desear ciertas cosas y comenzar a poner las bases para eventualmente establecer mis raíces en alguna parte y con algún proyecto. No se que es lo que quiero, quisiera sentirme enfocada y decidida con algo, también quiero en los próximos cinco años tener mi propia familia y mis raíces, sin preocupaciones económicas y contenta con un proyecto que me haga sentirme satisfecha. Quiero todo esto porque me siento lista. Me siento lista para no seguir buscando , aunque me parece muy importante estar constantemente queriendo aprender y crecer. Lo lograré si sigo aprendiendo, conociendo gente y cosas nuevas, aunque sea un poco contradictorio el querer tener una base…creo que el moverse y conocer a gente nueva crea un aprendizaje único y puede ayudar a crear un enfoque o camino propio. Algunos de los retos o limitaciones que tengo son el dinero, mi familia (el querer estar con ellos, no por obligación simplemente porque quiero hacerlo y quizá no sea factible en todo momento por motivos $), esa sensación de que no tengo suficiente tiempo por lo tanto hago demasiado, pero sin enfoque. Como voy a superar estos problemas…pues, ganándome la lotería sería bueno :p pero seguir aprendiendo y trabajando internamente, darle más importancia a mi practica y aceptar que no puedo controlar todo y a todos.
En la tarde tuve una sesión con Mayan, la hermana de Kobi –uno de los dueños/líderes del templo. Después de hablar unos minutos me pregunto dónde me dolía y nuevamente rompí en lágrimas. Le dije que no tenía dolor de cuerpo sino tristeza y le conté todo, sus palabras fueron tranquilizantes y tuve una sesión de reflexología (por primera vez). Fue interesante pues pensé que sería más fuerte o agresiva. En cambio estuve increíblemente relajada, sentí mucha energía simplemente comenzar a fluir y fue muy raro en un momento me toco una parte del pie y fue como si todo el mundo se pusiera en mute de repente y se quedara increíblemente quieto. Durante todo el tiempo no pude abrir los ojos, fue muy raro pero una gran sensación. Al salir me sentí más ligera y tranquila. Justo después tuvimos hora y media de Chi Kung que fue también muy rico. Mi cabeza seguía yéndose de a momentos pero con menos angustia y dolor y con más tranquilidad.
Después de cenar tuvimos una sesión de meditación activa de Osho que me acordó a mi mamá y mi tía, ¡y como me hubiese gustado que estuviese viviendo este lugar conmigo! Primero nos sacudimos y después bailamos, todo con los ojos cerrados. Normalmente, o anteriormente, este tipo de actividad sobre todo en el primer día lo hubiese hecho como con vergüenza o consciente de los demás…hoy y ahora me metí con toda y no dude ni un minuto, a veces me imaginaba siendo la única en el salón y a veces sentía que todos nos movíamos con el mismo ritmo hacia el mismo lugar. La última parte ya fue de meditación inmóvil y lamentablemente mi cabeza seguía muy activa. Al final lo que me dije a mi misma fue “aceptaro” y no frustrarme pues nada positivo traería y simplemente estar consciente y comparar en unos días si quizá se me hace mas fácil.
Y con eso, termino mi primer día de regreso y vuelvo a escribir mis experiencias diarias (Aunque implique trasnocharme un poco y este muy cansada, me alegra dedicarle el tiempo a plasmarlo todo.) Buenas noches.